La fascitis plantar es una afección dolorosa que afecta a la planta del pie, específicamente la fascia plantar, una banda de tejido conectivo que se extiende desde el talón hasta la base de los dedos del pie. Esta afección es común y puede afectar a personas de todas las edades, aunque es más frecuente en adultos de mediana edad y atletas.
Síntomas de la Fascitis Plantar
Los síntomas característicos de la fascitis plantar incluyen:
1. Dolor en el talón:
La mayoría de las personas experimentan dolor agudo en el talón, especialmente al dar los primeros pasos por la mañana o después de periodos prolongados de inactividad.
2. Dolor en el arco del pie:
El dolor también puede irradiar hacia el arco del pie.
3. Rigidez:
La rigidez en el pie es común, y algunos pacientes pueden notar una sensación de tirantez en la parte inferior del pie.
4. Inflamación:
La zona afectada puede estar inflamada, lo que contribuye al dolor y la incomodidad.
Causas de la Fascitis Plantar
La fascitis plantar suele ser el resultado de una combinación de factores, que pueden incluir:
1. Sobrecarga o estrés repetitivo:
Actividades que ejercen presión constante en la fascia plantar, como correr o estar de pie durante largos periodos, pueden desencadenar la afección.

2. Problemas en la biomecánica del pie:
Desalineaciones en la forma en que los pies se mueven y soportan el peso corporal pueden aumentar el riesgo de desarrollar fascitis plantar.
3. Obesidad:
El exceso de peso puede aumentar la presión sobre la fascia plantar.
4. Calzado inadecuado:
El uso de zapatos que no brindan un buen soporte puede contribuir al desarrollo de la afección.
Diagnóstico y Tratamiento
El diagnóstico de la fascitis plantar suele basarse en la historia clínica y un examen físico realizado por un Traumatólogo en Panamá. En algunos casos, pueden realizarse pruebas de imagen, como radiografías o ultrasonidos, para descartar otras afecciones.
El tratamiento de la fascitis plantar puede incluir:
1. Descanso:
Evitar actividades que agraven los síntomas.
2. Terapia física:
Ejercicios específicos pueden ayudar a fortalecer los músculos del pie y mejorar la biomecánica.
3. Ortopedia:
El uso de plantillas ortopédicas o zapatos con soporte adecuado puede aliviar la presión sobre la fascia plantar.
4. Antiinflamatorios y terapia con hielo:
Estos pueden ayudar a reducir la inflamación y el dolor.
5. Inyecciones de corticosteroides:
En casos graves, se pueden administrar inyecciones para aliviar la inflamación.
6. Cirugía:
En casos raros y graves, la cirugía puede ser necesaria para liberar la fascia plantar.

Bibliografía Científica
Si deseas profundizar en la fascitis plantar, aquí tienes algunas fuentes científicas que puedes consultar:
1. «Plantar fasciitis: a concise review». Autores: A. J. Acevedo-Niebles, L. J. Vélez, L. G. Rodríguez-Castillo. Revista: Muscles, Ligaments and Tendons Journal. (2017)
2. «Epidemiology of Plantar Fasciitis in the General Population: A Systematic Review». Autores: Rebecca R. Zuurmond, et al. Journal of Science and Medicine in Sport. (2018)
3. «Plantar fasciitis and the Windlass Mechanism: A Biomechanical Link to Clinical Practice». Autores: Elizabeth A. Kelly, et al. Journal of the American Podiatric Medical Association. (2010)
4. «Treatment of Plantar Fasciitis». Autores: G. L. Roma, et al. American Family Physician. (2017)
Estas fuentes científicas te proporcionarán información detallada sobre la fascitis plantar, su diagnóstico y tratamiento, así como las últimas investigaciones en el campo.