¿Qué sucede si un dolor en las articulaciones te dificulta realizar esas actividades que tanto te encantaba practicar antes? La condición física de cada persona, y en particular la de quienes sufren problemas en articulaciones como la rodilla, puede ser determinante a la hora de escoger el tipo de ejercicio a ejecutar.
Uno de ellos son los ejercicios de bajo impacto. Estos se caracterizan por aumentar el ritmo cardíaco gradualmente y ejercer menos presión sobre las articulaciones en comparación con otro tipo de ejercicios más exigentes en ese sentido. Este tipo de ejercicios son más lentos y suaves, y están orientados a mantenerse activo sin agravar lesiones existentes o provocar nuevas dolencias.
Básicamente, los pies están en contacto con el piso, pedales o sobre cualquier superficie todo el tiempo, dándome menos presión a zonas como las rodillas, la cadera y los tobillos. Los ejercicios de alto impacto, por otro lado, normalmente involucran saltar y brincar. Uno no es necesariamente más difícil que el otro; simplemente apuntan a diferentes zonas del cuerpo.
Si por problemas de salud o asociadas a la edad no quieres renunciar a mantenerte en forma, este tipo de entrenamiento ayuda a mejorar la salud cardiovascular sin desmerecer el desarrollo de la masa muscular.
BENEFICIOS DE LOS EJERCICIOS DE BAJO IMPACTO
Ya sea en casa, en un gimnasio o en cualquier lugar, los ejercicios de bajo impacto tienen grandes beneficios para tu salud. Algunos de ellos son:
Te protegen de lesiones: Los ejercicios de bajo impacto tienen un riesgo de lesión mucho más bajo que los movimientos de alto impacto. Por esta razón, son excelentes para los principiantes o para cualquiera que deba tener cuidado con sus articulaciones. Especialmente para los que sufren de las rodillas.
Perfectos para los días de recuperación: si eres una persona que ejercita mucho, los ejercicios de bajo impacto son ideales para esos días donde necesitas recuperarte sin dejar de hacer alguna actividad física. También, Los movimientos de bajo impacto pueden facilitarte la vuelta a la rutina.
Te ayudan con los ejercicios de alto impacto: Debido a que los ejercicios de bajo impacto les aportan fuerza y flexibilidad a las articulaciones, pueden ayudar con los ejercicios de alto impacto que involucran las mismas áreas. Los ejercicios de bajo impacto, como el yoga y el estiramiento también pueden ayudarte a mejorar la postura, lo que es esencial para mantenerse en forma.
Disciplinas de ejercicios de bajo impacto:
Lo primero que debes considerar es que la información de internet no debe sustituir la evaluación de un profesional. Consulta con tu médico o terapeuta los ejercicios que puedes hacer si has sufrido una lesión seria de rodilla o si ya tienes una edad avanzada.
Existen muchas disciplinas increíbles que te ayudarán a mantenerte saludable sin poner en riesgo tus articulaciones. Algunas de ellas son: la natación, la elíptica, ciclismo, yoga, pilates, TRX, ejercicios funcionales que no impliquen saltos.
¿Cómo incorporar a mi vida los ejercicios de bajo impacto?
Puedes incorporar los ejercicios de bajo impacto fácilmente en tu rutina diaria, independientemente de tu edad o habilidad. Hay muchos ejercicios de bajo impacto que puedes hacer en tu casa, en tu oficina, mientras trabajas o cuando viajas. Te damos algunas ideas:
15 minutos de estiramiento al día.
En la medida de lo posible camina, ya sea en vez de tomar el ascensor, para ir al mercado o para llegar a tu trabajo.
Convierte tus diligencias en una rutina de ejercicios liviana caminando un poco más cuando vas de compras.
Aprovecha los momentos libres para moverte un poco, estirar, caminar, hacer yoga o cualquier ejercicio que ponga tu cuerpo en movimiento.
Evita en sedentarismo en casa.
Hacer ejercicios es la mejor manera de mantenerse saludable y encontrar uno perfecto para cada tipo de persona y sus necesidades es posible. Si tienes problemas de articulaciones (especialmente de rodilla) es importante acudir a un especialista para que evalúe tu salud general y así recomendarte las mejores opciones.